Sabemos que las lentes de colores y fantasía están de moda y por eso queremos advertir sobre el riesgo de un uso inadecuado. Antes de usar unas lentillas se debe pasar por consulta oftalmológica para una valoración previa y conocer cuáles son las condiciones oculares y si es apto para adaptarse lentillas.
Tras esto, será el optometrista el que haga las pruebas necesarias para saber qué tipo de lentilla es la más adecuada. No, no vale cualquiera. Las lentillas se adaptan según la superficie corneal y por lo tanto, no se trata de una medida estándar ya que cada ojo es distinto. Además, es necesario hacer un seguimiento para ver si son bien toleradas por el paciente y valorar si es necesario realizar cambios o ajustes.
Otro de los factores a tener en cuenta es que las lentillas requieren un proceso exhaustivo de cuidado, limpieza y mantenimiento, no llevarlo puede generar el desarrollo de enfermedades o infecciones
Sin garantías
¿Adquirirlas por internet? ¿Sin ningún tipo de control? Esto ya dice mucho sobre su seguridad. El ojo es una superficie delicada y las lentillas son elementos ópticos sanitarios que están en contacto directo con la superficie ocular por lo que deben utilizarse solo si se ha realizado previamente un examen visual y unas revisiones periódicas.
Esto importante recordar que solo un especialista puede asesorarte al respecto.