Los xantelasmas son pequeños tumores benignos que crecen en ocasiones en torno a los párpados o en ellos. Se trata de un conjunto de manchas amarillentas que aparecen en el ángulo interno del ojo, en el párpado superior, causado por depósitos intradérmicos de colesterol. Estas manchas protuberantes pueden presentarse en personas con trastornos metabólicos previos, aunque en ocasiones surgen en pacientes sin causa metabólica subyacente. Por ello, ante la aparición de estos abultamientos, es preciso que un especialista los analice y determine si es preciso realizar pruebas adicionales para conocer nuestro estado de salud general.
No es raro que surjan en pacientes con hipercolesteremia, cierto tipo de tumores, diabetes o cirrosis. Estas patologías pueden tener consecuencias graves si no son diagnosticadas, ya que algunas de ellas cursan sin otros síntomas, por lo que ante cualquier sospecha debemos acudir a un médico. Sin duda la aparición de un xantelasma es un signo que debe despertar nuestra atención.
Los xantelasmas también pueden aparecer en otras partes del cuerpo, como en las articulaciones o los glúteos. En estos casos se las denomina xantomas. Estas protuberancias no causan dolor y su tamaño es muy variado. Incluso se han registrado casos de xantomas de más de 7 centímetros de diámetro, lo que supone un tamaño más que considerable.
El procedimiento correcto es realizar una biopsia de este abultamiento. Si se trata de un xantelasma se hallará un depósito de colesterol en el análisis. Posteriormente se debe realizar un examen sanguíneo para detectar los niveles de lípidos en la circulación, así como para descartar la diabetes o enfermedades hepáticas.
Mediante técnicas quirúrgicas sencillas podemos extirpar los xantelasmas. Sin embargo, no es raro que vuelvan a surgir tiempo después. Lo ideal es tratar la enfermedad que los esté provocando en el caso de que esta sea la cuasa. Normalmente con la reducción de los niveles de grasa en sangre, logramos que estas lesiones cutáneas se reduzcan o desaparezcan.
Nosotros recomendamos eliminarlas cuando ocasionen un problema estético o limiten la visión. En el Instituto Oftalmológico Amigó contamos con los especialistas adecuados. La cirugía plástica oftálmica palpebral y de las vías lagrimales (o cirugía oculoplástica) es un área especializada de la oftalmología que se ocupa del tratamiento médico quirúrgico de las enfermedades de los párpados, el sistema lagrimal y la órbita (cavidad de hueso que rodea el ojo), y de la reconstrucción estética periocular. Ya que dicha cirugía puede afectar nuestra capacidad visual, los cirujanos oculoplásticos son los más cualificados para realizar esta delicada cirugía y a la vez proporcionar cualquier cuidado que el propio ojo pueda necesitar.
La gran mayoría de estos procedimientos se realizan en nuestro centro, bajo anestesia local asistida y en régimen ambulatorio, es decir, sin ingreso hospitalario. Esto sin duda aporta comodidad y seguridad a nuestros pacientes.